Hace más de una semana que los pronósticos del tiempo anunciaban el temporal de nieve y bajas temperaturas que estamos atravesando. Tiempo más que suficiente para que los responsables municipales preparasen los recursos materiales y humanos necesarios para paliar la situación, pues las alarmas ya estaban activadas.
El viernes, día 8, hicimos ver al concejal de servicios, Sr. Tapetado, que la situación requería de todos los recursos municipales disponibles, además del apoyo de empresas externas con máquinas adecuadas. Poco caso nos hicieron. Su respuesta fue que “hacían todo lo que podían y que llegaban donde llegaban”.
La realidad es que durante toda la tarde del viernes no paró de nevar y el dispositivo municipal dirigido por el alcalde y el concejal no se vio por ningún sitio. Tan solo hemos visto palas limpiando algunas calles durante el sábado. Hoy domingo parece que ya no es necesario.
Los responsables municipales no han hecho lo mínimo que se esperaba de ellos, más allá de hacerse algunas fotografías -haciendo como que hacen- y grabarse unos vídeos esquiando en el castillo, como el concejal de Servicios, el Sr. Tapetado; eso sí, después de pedir a la población que no saliese de sus casas si no era estrictamente necesario. Eso es dar ejemplo.
Reconocemos que la nevada ha sido muy importante y que no se pueden resolver todas las situaciones que surgen, pero de ahí a la inoperancia absoluta hay un trecho grande.
Y si no tienen recursos municipales suficientes, éste es uno de los casos donde está justificado recurrir a los medios privados en la medida que sea preciso.
Se lo dijimos y se los volvemos a repetir: se pueden hacer las cosas mejor.
- Deberían haber puesto en funcionamiento (como se les advirtió), desde el viernes por la mañana, varios vehículos (palas, quitanieves, etc.) en turnos durante las 24 h. para despejar las calles de nieve (esto es fundamental), aprovechando que estaba blanda y se trabajaba mucho mejor que cuando se hiela.
- Organizar a todo el personal disponible del ayuntamiento, también por turnos, para despejar aceras, cruces, pasos de cebra, etc. Estos sí son servicios extraordinarios justificados y no los que nombran en otras ocasiones.
- Comprar y repartir más sal. ¿Nos pueden decir cuánta sal han comprado?
La previsión de fuertes heladas también era conocida y hoy, domingo, la nieve se ha congelado y es mucho más difícil realizar trabajos de limpieza. Además, los equipos que hemos visto son, únicamente, un tractor echando sal con una abonadora y algunos operarios con palas y otro pequeño material.
Estamos en pleno temporal y esto no ha terminado. Durante toda la semana que viene hay previsión de fuertes heladas que ocasionarán aún más problemas y quizás más graves.
Hemos leído multitud de quejas justificadas en las redes sociales: calles intransitables, vecinos/as que no pueden comprar productos básicos, acudir a un tratamiento médico ineludible o mover vehículos inmovilizados por la nieve para ir a trabajar.
Un ejemplo que ilustra la incompetencia de la gestión municipal ante los estragos de la borrasca es la desatención en la residencia de mayores. Después de 48 horas cayendo nieve, esta misma mañana de domingo los trabajadores casi no podían acceder por la puerta principal. Al parecer el Ayuntamiento ha comunicado que no tenía medios para resolverlo y el personal de la residencia con la ayuda de familiares de trabajadores/as y un vehículo pala de un vecino han podido resolver la situación. No sabemos si la Sra. Concejala de Servicios Sociales, que se prodiga fotografiándose firmando convenios con asociaciones sabrá algo de esto y se habrá ocupado de ello.
Ya que han sido incapaces de actuar eficazmente hasta ahora, esperamos que se enmienden y actúen con todos los recursos necesarios, púbicos y privados.
Por último, rogamos a nuestros responsables municipales que eviten la tentación de caer en las excusas o de relatar casos de otros lugares que estén peor que nosotros; No les pedimos nada excepcional, sino que hagan cosas posibles y que dependen solo de su voluntad: varios vehículos que retiren nieve y equipos humanos bien organizados y dirigidos, trabajando 24 horas hasta que se consiga resolver los incidentes y problemas ocasionados.
Por ahora, poca previsión y mucha incompetencia.